La regla de los 10 minutos del ‘change management’ o cómo afrontar desde nuestros despachos jurídicos el imparable cambio social, político, cultural y económico en el que estamos inmersos. Una reflexión, una filosofía, un método… la mejora continua se transforma en la clave, en la principal estrategia del “change management” en nuestros despachos jurídicos, ante un nuevo paradigma en continuo movimiento sobre la base de la globalización de los servicios profesionales y los valores cambiantes de los clientes.
La mejora continua es una estrategia de compromiso y de responsabilidad personal. De coherencia y honestidad en la que los objetivos no son la meta, sino caminos por recorrer. Una estrategia en la que la motivación marca nuestra dirección ventajosa. La motivación no es otra cosa que `tener motivos`, y no tenemos mayor motivación los abogados que obtener el Santo Grial, esto es, la confianza del cliente, antes, durante y después de prestados nuestros servicios. Pero ello solo lo conseguiremos con una perseverante gestión de nuestros despachos -comunicación, procesos y tecnología-, con un aprendizaje continuo como profesionales, y con una constante mejora personal.
“Kai” = Continua · “Zen” = Bondad · “Kaizen = Mejora continua
Kaizen es una estrategia de mejora continua dirigida al cliente -en términos profesionales-. Comienza conociendo y comprendiendo las necesidades y expectativas del cliente con el fin de superar éstas más allá de la mera satisfacción, y continúa con su aplicación directa sobre los indicadores operativos y económicos, con el gran condicionante de que no deba pasar ni un solo día sin practicar una mejora en alguno de ellos.
· Reconocer la existencia de un problema
· Identificar dicho problema
· Resolver el problema, y
· Prevenir problemas.
La dinámica de Kaizen se sustentada en:
· La estandarización de procesos
· La constante búsqueda de ‘desperdicios’, y
· La organización por costes y tiempo.
Supone determinar los procesos, sistemas, o mecanismos necesarios para la diaria gestión eficiente de los recursos, facilitando la manera de realizar el trabajo, mostrando la relación causa-efecto, permitiendo auditar, y muy especialmente preservando de manera efectiva el know-how,y la experiencia profesional. Ello conlleva la obtención de resultados en términos de rentabilidad y sostenibilidad, y garantiza la satisfacción del cliente.
- en primer lugar la creación de una cultura de aptitud tendente al cambio, y
- en segundo lugar la creación de una cultura colaborativa de aporte de talento.
¿Por dónde empezar? No hay mejor método que la vivencia personal a través de la práctica de ejercicios que nos permitan desarrollar una mente abierta y creativa para detectar problemas y generar nuevas oportunidades; establecer hábitos que aporten valor; y aprender a trabajar alineados en equipo -que no en grupo-.
Crear cultura…. En este artículo me voy a centrar en una sola práctica, consiste en una técnica de PNL que actúa a nivel de comportamiento para propiciar la creación de hábitos positivos, se denomina ‘Re-encuadre en seis pasos’. En el ámbito del ejercicio profesional esta técnica tiene muchas posibilidades para cambiar por
ejemplo el hábito de posponer lo importante, las piernas temblorosas ante una reunión importante con el cliente o en una negociación, o la ansiedad ante el juez o el fiscal…o para crear el hábito de mejora continua.
Pasos:
1.- Identifica la conducta que quieres cambiar.
2.- Establece un forma de comunicar con la parte que es responsable de esa conducta.
3.- Descubre qué beneficio obtienes con esa conducta que no deseas.
4.- Pregúntate ¿cómo conseguir ese mismo beneficio de alguna otra forma que sea beneficiosa para ti? Piensa, al menos, tres alternativas de comportamiento útiles para lograr ese mismo beneficio.
5 .- Céntrate en la parte responsable del comportamiento que deseas cambiar (2do. paso) y proponte utilizar alguna de las nuevas opciones. Si no lo tienes muy claro, vuelve al paso cuatro y encuentra más opciones.
6.- Comprobación: ¿Hay alguna objeción al nuevo comportamiento? Si la hay, vuelve de nuevo al paso cuatro.
Por último, proyéctate hacia el futuro, haciendo esa nueva conducta, manteniendo ese beneficio, donde la antigua conducta limitante ha desaparecido y tu forma de trabajar ha cambiado positivamente.
Tan solo necesitas 10 minutos cada día para reflexionar y pensar en una pequeña mejora en tu actitud personal, contigo mismo -tus motivaciones-, con tus compañeros de despacho, con tu profesión, con tu cliente y con la sociedad.
Finalmente, concreta en “La Rueda de Deming”:
· 1er. Ciclo, EREA : Estandariza · Realiza · Evalúa · Actúa ; y una vez controlado y habituado, mejora lo establecido pasando al
· 2do. Ciclo, PREA: Planifica · Realiza · Evalúa · Actúa
Tras esto te vendrán por añadido los mejores resultados en términos de rentabilidad del despacho y gestión del cliente actuando sobre los recursos de los que dispones.
CONCLUSIÓN: No hay cambio, no hay progreso, no hay innovación si no hay actitud perseverante, responsable y coherente, tendente al cambio, al progreso y a la innovación.
Este artículo ‘La regla de los 10 minutos del ‘change management’ ha sido publicado en el periódico ‘CONFILEGAL’, también puedes acceder a él en este enlace ‘change management’ Por otro lado, allí encontrarás más artículos que yo misma he escrito, y los de otros compañeros que nos enriquecen constantemente con sus aportaciones.
Ya me lo cuentas ¡¡¡
Cristina M. Ruiz Pérez
Cristina M Ruiz Pérez 